Para los feligreses de la Parroquia de Nuestra Señora de Ujarrás ubicada en Barrio Córdoba de San José, Costa Rica y para los más de 3000 creyentes que mantienen correspondencia electrónica continua con el Presbítero Álvaro Sáenz, además de los radioescuchas que lo seguíamos en Radio María, ha resultado incomprensible e inexplicable, la súbita decisión de la Junta Directiva de esa emisora de suspender al Padre Sáenz en sus funciones de Director de ese medio.