person holds chalice with liquid on table

El sacerdote, signo positivo de contradicción

“El que la hace, la paga”, dice la máxima, que actúa como ley suprema. Todo se paga: una deuda, una compra, un alquiler o un delito. O paga la deuda o queda incapacitado para nuevos créditos, lo que es una especie de muerte civil. Pero el sacerdote actúa con otra lógica: perdona. Perdona, porque es su oficio, pues sirve a “Jesús, incomparable perdonador de injurias”.